Humberto Vacaflor, El Diario:
Although the MAS government is the one that allocates the largest fortunes to propaganda, which would make one believe that it appreciates the dissemination of information, at the same time it prohibits the release of news.
It is a vocation that began in 2006, when it ordered YPFB to discontinue monthly bulletins about its activities, which led to the fact that it is now unknown how much gas is produced, how much remains in reserves, how much gasoline is imported… or how many dollars are left in the Central Bank.
The desire to hide information grows as economic data or government policies worsen.
Now, has ordered that forest fires not be reported, those fires that are authorized and even encouraged by a dozen laws approved by the MAS.
This puts Bolivians in an absurd situation, because they must breathe the smoke from the fires, they must accept that school classes are interrupted, as well as flights at some airports, but they must not find out about the origin of the fire or the causes of the accidents fires.
The park rangers have been expressly prohibited from even talking about the fires, but much less can they talk about the coca fields existing in the parks, those sanctuaries of fauna and flora that should be protected by the army.
Indeed, the National Service of Protected Areas (Sernap) has issued the order to prohibit the dissemination of news about the fires, more firmly than the instructions it gave to prohibit the fires.
What is prohibited is reporting about fires, not having caused them. The same thing happens with new coca trees.
At the moment it is not prohibited to reproduce information about the discovery and destruction of cocaine factories, which the Ministry of Government reports, such as 26 in the last three days.
What the Government cannot stop is the dissemination, through media that it does not control, of news coming from abroad about the delicate situation of the economy, as is the case of the latest Standard & Poors report. This rating agency has lowered Bolivia’s rating due to the drop in exports, low reserves and fiscal deficit.
Nor can we stop the news about the decision of the governments of Argentina and Brazil to look for new suppliers of natural gas, given that Bolivia has stopped being a reliable country.
What is impossible to avoid is the news about Bolivian small planes that crash in neighboring countries or are captured carrying our star product.
Aunque el gobierno del MAS es el que destina las más grandes fortunas a la propaganda, lo que haría creer que aprecia la difusión de informaciones, al mismo tiempo prohíbe que se den noticias.
Es una vocación que comenzó en 2006, cuando ordenó que YPFB interrumpa los boletines mensuales sobre sus actividades, lo que llevó a que ahora no se sepa cuánto gas se produce, cuánto queda en las reservas, cuánta gasolina se importa… ni cuántos dólares quedan en el Banco Central.
El afán de ocultamiento de la información crece conforme empeoran los datos de la economía o las políticas del gobierno.
Ahora ha ordenado que no se informe sobre los incendios de bosques, esos incendios que son autorizados e incluso alentados por una docena de leyes aprobadas por el MAS.
Esto pone a los bolivianos en una situación absurda, porque deben respirar el humo de los incendios, deben aceptar que las clases escolares se interrumpan, igual que los vuelos en algunos aeropuertos, pero no deben enterarse del origen del fuego ni de los causantes de los incendios.
Los guardaparques han sido expresamente prohibidos de hablar siquiera de los incendios, pero mucho menos pueden hablar de los cocales existentes en los parques, esos santuarios de la fauna y la flora que debían ser protegidos por el ejército.
En efecto, el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap) ha emitido la orden de prohibir la difusión de noticias sobre los incendios, con más firmeza que las instrucciones que dio para prohibir los incendios.
Lo que está prohibido es informar sobre los incendios, no haberlos provocado. Lo mismo ocurre con los cocales nuevos.
Por el momento no está prohibido reproducir las informaciones sobre el descubrimiento y destrucción de fábricas de cocaína, de lo que da cuenta el Ministerio de Gobierno, como las 26 de los últimos tres días.
Lo que no puede frenar el Gobierno es la difusión, por los medios que no controla, de noticias que llegan del exterior sobre la delicada situación de la economía, como es el caso del último informe de Standard & Poors. Esta calificadora ha rebajado la nota de Bolivia debido a la caída de las exportaciones, las bajas reservas y el déficit fiscal.
Ni se pueden frenar las noticias sobre la decisión de los gobiernos de Argentina y Brasil de buscar nuevos proveedores de gas natural, en vista de que Bolivia ha dejado de ser un país confiable.
Lo que es imposible evitar son las noticias, sobre las avionetas bolivianas que caen en los países vecinos o son capturadas llevando nuestro producto estrella.
https://www.eldiario.net/portal/2023/11/24/prohibido-informar/
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