Editorial El Deber:
The three blows of masismo before saying goodbye
Not even on their last day could MAS assembly members prioritize the country’s stability over their insatiable thirst for revenge. The approval of the “Exceptional Law for the Deferral of Loan Payments,” as seasoned economists had warned and opposition deputies emphasized, opens the door to a collapse of the financial system at an extremely delicate moment for our economy.
The law, meant to relieve credit pressure for certain groups, is indeed an urgent necessity. That’s why the Senate, in its review process, chose to narrow its scope to families at risk of losing their social housing due to the great difficulty of meeting monthly loan payments. In numbers, some 45,000 families were expected to benefit.
However, the version debated in the Assembly, under the complacent silence of David Choquehuanca, included modifications that automatically extended the benefit to more than 1,400,000 savers. In this second case, and given the volume of people involved, the damage to the banking system is more than evident.
Economist and former director of the Central Bank of Bolivia, Walter Morales, explained the law’s redundancy by recalling that the banking system already has regulations allowing certain loans to be refinanced in exceptional situations. The difference, he noted, lies in the precision with which banks identify each case individually, as opposed to the generalization encompassed by the law just approved by the Plurinational Legislative Assembly (ALP).
MAS legislators, once again united to pass this law, were fully aware of its consequences. In fact, one of them made it clear during debate: he drew a fatal line for the incoming government and warned, “In three months, we’ll be out on the streets,” acknowledging the implications that this and other measures taken in the final week entail.
Indeed, the past two weeks have seen frantic parliamentary activity with the approval of several loans. Through an expedited legislative process, the reunited MAS caucus—now with all three factions acting in unison—approved international loans amounting to roughly $500 million, further deepening the country’s debt.
Another decisive blow from MAS at the close of its parliamentary term came at 2:30 a.m. on Thursday during a marathon session. Exhausted after reading and debating law after law, deputies proposed to proceed “by dispensing with procedures” to modify ten articles of the Chamber of Deputies’ general rules. Stated like that, it might sound merely procedural.
However, those pushing for the change knew perfectly well the content of these articles, which, of course, were not read during the session “because of the late hour.” They restored the requirement of a two-thirds vote needed for the approval of various laws and legislative procedures. Five years after suspending the two-thirds rule, masismo, in a clear act of political maneuvering, reinstated the original provision it had once altered to benefit itself during Luis Arce’s administration—now restoring it to obstruct the incoming president, Rodrigo Paz.
Nevertheless, previous agreements and positions among the three major parliamentary blocs suggest that the two-thirds barrier will not be an obstacle to reaching legislative consensus.
Editorial El Deber:
Los tres golpes del masismo antes de decir adiós
Ni siquiera en su último día, los asambleístas del MAS pudieron priorizar la estabilidad del país por encima de su anhelo insaciable de venganza. La aprobación de la “Ley excepcional de diferimiento de pagos de crédito”, tal como lo adelantaron economistas curtidos y lo remarcaron diputados de oposición, abre las puertas a un colapso del sistema financiero en un momento extremadamente delicado para nuestra economía.
La ley, la posibilidad de aliviar la presión crediticia en favor de algunos grupos, es una urgencia más que evidente. Por eso, la Cámara de Senadores, en su labor de revisión, optó por matizar su alcance para aquellas familias en riesgo de perder sus viviendas sociales ante la gran dificultad de hacer frente al pago mensualizado de los créditos. En números, se estimaba unas 45.000 familias beneficiadas.
Sin embargo, la ley debatida en la Asamblea, ante el complaciente silencio de David Choquehuanca, sumaba algunas modificaciones que extendían, de modo automático, el beneficio a más de 1.400.000 ahorristas. En este segundo caso, y por el volumen de las personas involucradas, el perjuicio para el sistema bancario es más que evidente.
El economista y exdirector del Banco Central de Bolivia, Walter Morales, expuso lo innecesario de esta ley al recordar que la banca ya cuenta con una reglamentación que permite refinanciar ciertos créditos ante situaciones de excepcionalidad. La diferencia, decía el especialista, radica en la precisión con la que operan los bancos al identificar cada caso desde la individualidad, frente a la generalidad que abarca la actual ley aprobada por la ALP.
Los asambleístas del MAS, unidos nuevamente para aprobar esta norma, conocían perfectamente las consecuencias de la ley. Es más, alguno, en su argumentación, lo expuso con claridad: trazó un límite fatal para el nuevo gobierno y advirtió que “en tres meses nos veremos en la calle”, conocedor de las implicaciones que ésta y otras medidas asumidas en esta última semana suponen.
Ciertamente, las dos últimas semanas se ha visto una frenética actividad parlamentaria con la aprobación de diversos créditos. Bajo una modalidad de tratamiento exprés de las leyes, la reunificada bancada del MAS, ya con las tres facciones actuando al unísono, aprobó préstamos de entidades internacionales por un monto cercano a los $us 500 millones, situación que ahonda en endeudamiento del país.
Otro de los certeros golpes del MAS en este cierre de gestión parlamentaria se produjo a las 2:30 de la madrugada del jueves en una maratónica sesión. Cansados los diputados de leer y debatir normas y más normas, se propuso el tratamiento ‘por dispensación de trámites’ de la modificación de diez artículos del reglamento general de la Cámara de Diputados. Dicho así, pareciera una modificación procedimental.
Los impulsores de este cambio sabían el contenido de cada uno de estos artículos, que, obviamente, no se leyeron en la sesión “por lo avanzado de la misma”, recuperaban los 2/3 de votos necesarios para la aprobación de diversas leyes y procedimientos legislativos. Cinco años después de suspender los 2/3, el masismo, en una notoria bajada de línea, reponía la norma original que alteró para beneficiarse durante la gestión de Luis Arce y restituye para entrabar la gestión del presidente electo Rodrigo Paz.
Sin embargo, los acuerdos y posicionamientos previos de los tres grandes bloques parlamentarios anticipan que la barrera de 2/3 no será impedimento para alcanzar acuerdos parlamentarios.
https://eldeber.com.bo/opinion/2025-11-2-22-5-42-los-tres-golpes-del-masismo-antes-de-decir-adios
