By Ariel Melgar, El Deber:
Maximiliano Dávila Pérez is accused of alleged criminal association to import controlled substances, a crime that carries a sentence of 20 years to life imprisonment in the northern country where he will be tried.

The former national director of the Special Force to Fight Drug Trafficking (Felcn), Maximiliano Dávila Pérez, is facing a life sentence in the United States, after the Supreme Court of Justice (TSJ) gave the green light to his extradition to the northern country on Wednesday.
The Court of the Southern District of New York requested the extradition of Dávila, former anti-drug chief in the government of Evo Morales. The North American justice requested Dávila to be tried in that country at the end of September.

The former anti-drug czar is accused of collaborating with a criminal organization that crystallized cocaine in Bolivia to sell it abroad.
The president of the TSJ, Marco Jaimes, reported that the US justice system accused Dávila of the crimes of criminal association for trafficking in controlled substances and criminal association for the handling of weapons related to drug trafficking.
The former head of the Felcn can be sentenced to life imprisonment by the Southern District Court of the State of New York, which is the maximum sentence for one of the crimes of which he is accused in the North American country.
“He is accused of criminal association to import controlled substances and criminal association for the handling of weapons related to drug trafficking. The first crime carries a sentence of 20 years to life imprisonment and the second crime of 10 to 20 years,” Jaimes explained.

On January 22, 2022, Dávila was arrested in Villazón, Potosí, when he was trying to cross the border towards Argentina. In February 2022, he was sent to the San Pedro prison with six months of preventive detention for the crime of money laundering.
“The case of the crime for which he is being prosecuted and detained by the Departmental Court of Justice of La Paz carries a sentence of 5 to 10 years in prison and is for money laundering, a sanction that in Bolivia is irrelevant in relation to the possible sentence to be imposed in the United States,” explained the president of the TSJ to justify what motivated him to accept Dávila’s extradition.
Por Ariel Melgar, El Deber:
Maximiliano Dávila Pérez es acusado por supuesta asociación delictuosa para importar sustancias controladas, delito que tiene una pena de 20 años de prisión a cadena perpetua en el país del norte donde será juzgado.

El exdirector nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn), Maximiliano Dávila Pérez, se expone a una condenado de cadena perpetua en Estados Unidos, luego de que este miércoles el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) diera luz verde a su extradición al país del norte.
El Tribunal del Distrito sur de Nueva York solicitó la extradición de Dávila, exjefe antidroga en el gobierno de Evo Morales. La justicia norteamericana solicitó a Dávila para ser juzgado en ese país a finales de septiembre.

El exzar antidroga es acusado de colaborar con una organización criminal que cristalizaba cocaína en Bolivia para venderla al exterior.
El presidente del TSJ, Marco Jaimes, informó que la justicia estadounidense acusó a Dávila por los delitos de asociación delictuosa por tráfico de sustancias controladas y asociación delictuosa para el manejo de armas relacionadas con narcotráfico.
El exjefe de la Felcn puede ser condenado a cadena perpetua por el Tribunal del Distrito sur del Estado de Nueva York, que es la pena máxima por uno de los delitos de los que se lo acusa en el país norteamericano.
“Es acusado por asociación delictuosa para importar sustancias controladas y asociación delictuosa para el manejo de armas relacionas al narcotráfico. El primer delito tiene una pena de 20 años a cadena perpetua y el segundo delito de 10 a 20 años”, detalló Jaimes.

El 22 de enero de 2022, Dávila fue aprehendido en Villazón, Potosí, cuando intentaba pasar la frontera con dirección hacia Argentina. En febrero de 2022 fue enviado al penal de San Pedro con seis meses de detención preventiva por el delito de legitimación de ganancias ilícitas.
“El caso del delito por el cual se encuentra procesado y detenido por el Tribunal departamental de Justicia de La Paz tiene una pena de 5 a 10 años de cárcel y es por legitimación de ganancias ilícitas, sanción que en Bolivia carece de relevancia con relación a la posible pena a imponerse en Estados Unidos”, explicó el presidente del TSJ para justificar lo que motivó a aceptar la extradición de Dávila.
