Editorial, Pagina Siete:
The purger should be purged
The head of the MAS, Evo Morales, has announced an internal purge to get rid of the renovators of his party who are within the government of Luis Arce and of his party structures. That, according to him, is the main conclusion of the meeting to evaluate the electoral defeat in the second round of the governorships.
The logical and coherent thing would be for the former president to express at least one milligram of self-criticism, taking into account that the voices that point to him as the person responsible for the poor electoral performance of the MAS are becoming a strong and solid chorus. However, far from humbly taking on the renewal requests, the former president brings out his authoritarian character and threatens his colleagues with purging them.
The intimidation tactic was applied by Morales and his political entourage during the second round campaign, arresting former president Jeanine Añez and some of her collaborators, and that is precisely what the voters rejected at the polls. But, the former president does not seem to have learned his lesson and resorts to the same strategy now in his party.
The purge, in political terms, refers to the expulsion of harmful elements from a certain structure. In the case of MAS, it is clear that the harmful elements are not the renovators, but the hard wing of the party represented by Evo Morales and Juan Ramón Quintana, who influence (if they do not make decisions directly) in the government of Luis Arce.
So, if there were a real and beneficial purge for the ruling party, it would have to end with the expulsion of Morales and his former ministers, but it is clear that this will not happen and that, on the contrary, all those who ask for renewal will have to keep quiet. or they will be expelled.
It is not the first time that there have been requests for change within Evo Morales’ party and it is not the first time that the chief’s decisions have been imposed. The MAS has already lost several of its cadres due to the verticalism with which decisions are made. As a result, several dissidents won the regional elections with other party acronyms, including Eva Copa, Damián Condori, Alejandro Unzueta, Regis Richter and Ana Lucía Reis.
Faced with these leaderships, Morales had no better idea than to try to muddy them. Regarding Copa and Condori, he said that they are traitors because they met with the conservative Luis Fernando Camacho in Tarija, but what happened there was only a coincidence of elected authorities in the regional elections. He added that close associates of Copa spoke with people from Manfred Reyes Villa to plan a joint candidacy in 2025. The elected mayor of El Alto denied both extremes and said that the traitor is Morales for having fled in 2019, abandoning his people.
But, MAS’s strategy to get possible contenders out of the way went much further by stating that Beni’s candidates were financed by drug trafficking, without presenting any evidence in this regard. Along the same lines, former Minister of Government Carlos Romero said that the State has been overtaken in that department, where drug traffickers finance candidates.
As can be seen, the head of the MAS is not there to seduce militants, he is here to discipline them. Along these lines, attempts are already being announced to change the status of the MAS to silence critical voices.
Analysts and dissidents from the ruling party consider that this entire strategy is aimed at guaranteeing the candidacy of Evo Morales for the next elections. Morales is not resigned to losing power and from the moment he returned to the country he began working to regain it. And, if on the way he must trample on comrades, militants and even social leaders who until recently were his unconditional bishops, he will not hesitate to do so. He is starting with the dissidents and the renovators.
The bad news for the country is that President Luis Arce, instead of joining the renovators, has become a key piece of Morales’ strategy.
El purgador debería ser purgado
El jefe del MAS, Evo Morales, ha anunciado una purga interna para deshacerse de los renovadores de su partido que están dentro del gobierno de Luis Arce y de las estructuras de su partido. Esa, según dice, es la principal conclusión de la reunión de evaluación de la derrota electoral en la segunda vuelta de las gobernaciones.
Lo lógico y coherente sería que el expresidente exprese al menos un miligramo de autocrítica tomando en cuenta que las voces que lo señalan a él como el responsable del pobre desempeño electoral del MAS se están convirtiendo en un coro fuerte y sólido. Sin embargo, lejos de asumir con humildad los pedidos de renovación, el expresidente saca a relucir su carácter autoritario y amenaza a sus compañeros con depurarlos.
La táctica del amedrentamiento fue aplicada por Morales y su entorno durante la campaña de la segunda vuelta, apresando a la expresidenta Jeanine Añez y a algunos de sus colaboradores, y justamente eso es lo que rechazaron los electores en las urnas. Pero, el expresidente no parece haber aprendido la lección y recurre a la misma estrategia ahora en su partido.
La purga, en términos políticos, se refiere a la expulsión de los elementos nocivos de determinada estructura. En el caso del MAS, está claro que los elementos nocivos no son los renovadores, sino el ala dura del partido representada por Evo Morales y Juan Ramón Quintana, quienes influyen (si es que no toman decisiones directamente) en el gobierno de Luis Arce.
Entonces, si existiera una purga real y beneficiosa para el partido de gobierno, ésta tendría que terminar con la expulsión de Morales y sus exministros, pero está claro que eso no sucederá y que, por el contrario, todos aquellos que piden renovación tendrán que callar o serán expulsados.
No es la primera vez que hay pedidos de cambio dentro del partido de Evo Morales y tampoco es la primera vez que las decisiones del jefe se imponen. El MAS ya ha perdido a varios de sus cuadros debido al verticalismo con el que se toman las decisiones. Producto de ello, varios disidentes ganaron las elecciones regionales con otras siglas partidarias, entre ellos Eva Copa, Damián Condori, Alejandro Unzueta, Regis Richter y Ana Lucía Reis.
Frente a estos liderazgos, Morales no tuvo mejor idea que tratar de enlodarlos. Sobre Copa y Condori dijo que son traidores porque se reunieron con el conservador Luis Fernando Camacho en Tarija, pero lo que hubo allá fue únicamente una coincidencia de autoridades electas en los comicios regionales. Agregó que allegados de Copa conversaron con gente de Manfred Reyes Villa para planificar una candidatura conjunta el 2025. La alcaldesa electa de El Alto negó ambos extremos y dijo que el traidor es Morales por haber huido en 2019 abandonando a su pueblo.
Pero, la estrategia de MAS por quitarse del camino a eventuales contendores fue mucho más allá al indicar que los candidatos de Beni fueron financiados por el narcotráfico, sin presentar ninguna prueba al respecto. En la misma línea, el exministro de Gobierno Carlos Romero dijo que el Estado ha sido rebasado en aquel departamento, donde los narcos financian candidatos.
Como se puede ver, el jefe del MAS no está para seducir militantes, está para disciplinarlos. En esa línea, ya se anuncian intentos de cambiar el estatuto del MAS para acallar las voces críticas.
Analistas y disidentes del partido de Gobierno consideran que toda esta estrategia está orientada a garantizar la candidatura de Evo Morales para las próximas elecciones. Morales no se resigna a perder el poder y desde el mismo instante en que regresó al país empezó a trabajar para recuperarlo. Y, si en el camino debe pisotear a compañeros, militantes y hasta a los dirigentes sociales que hasta hace poco eran sus incondicionales alfiles, no dudará en hacerlo. Está empezando por los disidentes y por los renovadores.
La mala noticia para el país es que el presidente Luis Arce, en vez de unirse a los renovadores, se ha convertido en una ficha clave de la estrategia de Morales.
https://www.paginasiete.bo/opinion/editorial/2021/4/22/el-purgador-deberia-ser-purgado-292579.html
Bolivian Thoughts 