By Oscar Antezana:
A transcendental step took place in Bolivia with the elections on August 17. We’ll see if democracy truly returns once the new president takes office and exercises the rule of law. I seriously doubt that PDC would govern; on the contrary, LIBRE would.
Unfortunately, the left is once again one step away from climbing back into power. Their acronyms may not be present, but their influence certainly is. Why do you think Evo is so pleased with the results? That alone says a lot. We also confirmed that the entire “opposition” was not from the right. UNIDAD, lukewarm and dull, is center-left—as their leaders themselves have implicitly admitted in interviews and in their platform. What’s more, its leader openly expressed support for PDC. Either he has unfinished business with MAS, or he’s a resentful sore loser (again), or he’s betraying the voters who once trusted him.
No one worried about PDC; it wasn’t on anyone’s radar as a main contender, but the leftists played their cards well with Paz and Lara. The former has shown himself to be incapable of governing even a small city, and the latter an ignorant firebrand. Paz is more lost than Little Red Riding Hood, and the wolf Lara is ready to devour him. Or maybe not—maybe Paz also knows he’s a wolf, and both, with MAS’s power, will once again devour Bolivia. But that’s hunger for power—don’t you remember how Paz Zamora and the MIR leaders of that time proclaimed that the ends justify the means? There you have it again. The worst part is they would do it knowing full well the damage MAS has inflicted on Bolivia. That has no name—or maybe it does, but my adjectives would burn right through this page.
The PDC’s main electoral offerings, presented one way or another, are more handouts and more subsidies, whether painted as higher pensions, tax amnesties, universal salaries for women, zero tariffs on cellphones and more—in short, an economic mess, even worse than the current one. Sure, it sounds attractive to the uneducated, but it’s an invitation to hell.
The vast majority of decent Bolivians, aware of the country’s current situation, would overwhelmingly vote for LIBRE. No one wants to keep living in the current crisis of dollar shortages, fuel scarcity, and spiraling inflation—not Samuel, Manfred, Jaime, or any figure influencing public opinion. If that’s so, why don’t they clearly and consistently say that one ticket will lead us to total collapse, while the other could pull us out of the economic and moral bankruptcy of the nation?
Despite everything, I am convinced LIBRE has great chances of winning in the runoff. Paz won’t measure up to Quiroga, and Lara won’t stop sabotaging and denting PDC’s candidacy. On one hand, LIBRE will gain a huge advantage in debates (the more, the better)—LIBRE’s ticket will swallow PDC whole. LIBRE must focus on attracting the UNIDAD vote (that party lacks the cohesion MAS had/has, and its voters are more thoughtful) and make the people realize (not just inform them) that PDC would simply pick up MAS’s baton to continue with authoritarianism, drug trafficking, and corruption.
Unfortunately, the first round was crucial in determining the makeup of the legislature, and Bolivians lost the opportunity to rebuild our nation as the “opposition” intended. To pass most laws requires an absolute majority, over 50%. With this in mind, in the Senate, LIBRE would have 12 senators, or one-third (36%) representation; PDC 44% (16 senators), UNIDAD 19% (7), and SÚMATE 3% (1). The majority plus one means 19 senators. LIBRE could make it with UNIDAD’s full support, among other political calculations. PDC would still be short three senators—easier to get, but UNIDAD’s backing would still be essential. This could be Samuel’s backdoor into power, if he doesn’t care about Bolivia. Of course, he might also want other gains. But he also has a better option: his party could support LIBRE and save us from the leftists. Samuel has the chance to show greatness—and above all, the country might reward him, perhaps in the short or medium term, with something he has never yet achieved. Maybe it’s his last chance. The situation in the Chamber of Deputies is similar.
What does this scenario suggest? At best, some improvement over the current situation—but that’s no consolation, since we couldn’t have sunk any lower. Some progress might be made, but likely with watered-down agreements, measures, or reforms. I also don’t rule out Lara backstabbing Paz with MAS’s support and the military indoctrinated for twenty years—or them fueling chaos so that their ticket closes Congress. If such horrific scenarios happen, Cuba, Venezuela, Russia, and China would be pre-warned to “save” the country (in reality, to finish devouring Bolivia) economically and shield it politically from any international protest.
The “ideal” outcome would be Tuto winning in the second round and assuming the presidency, while Rodrigo comes to his senses, his party splinters in the Assembly, and a legislative alliance is forged between LIBRE and PDC (plus any others willing to join). That would also deliver a decisive blow to the left. But international experience shows otherwise: leftists, from within and without, would not let them govern. Something exceptional would have to occur.
Por Oscar Antezana Malpartida:
Se dio un paso trascendental en Bolivia con las elecciones del pasado 17 de agosto. Veremos si realmente retorna la democracia una vez que el nuevo presidente asuma el poder y ejerza un estado de derecho. Dudo mucho si es gobierno el PDC; todo lo contrario si es LIBRE.
Lamentablemente, la izquierda está nuevamente a un paso de encumbrarse nuevamente. No estarán sus siglas, pero sí están presentes. Por qué creen que Evo está contento con los resultados, que ya es mucho decir. También confirmamos que toda la “oposición” no fue de derecha. UNIDAD, tibio y opaco, es de centro izquierda como sus líderes han admitido implícitamente en entrevistas y en su programa. Es más, su líder expresó su apoyo al PDC. O tiene algunas cuentas pendientes con el MAS, o es un niño rencoroso y mal perdedor (nuevamente), o es un traidor al electorado que confió en él.
Nadie se preocupó del PDC;no estaba en el radar de nadie como contendor principal, pero los zurdos la hicieron linda con Paz y Lara. El primero ha demostrado que es un incapaz, que no puede gobernar ni una ciudad pequeña, y el segundo que es un ignorante e incendiario. Paz está más perdido que Caperucita roja y el lobo Lara se lo va a comer. O tal vez no. Por ahí Paz sabe que también es lobo y ambos, con el poder del MAS, se volverán a engullir a Bolivia. Pero es la angurria de poder – ¿no se acuerdan que Paz Zamora y los líderes del MIR de ese entonces proclamaban que el fin justifica los medios? Ahí está, nuevamente. Pero lo peor de todo es que lo harán sabiendo todo el daño que hizo el MAS a Bolivia. Eso no tiene nombre, o tal vez sí, pero mis adjetivos quemarían este pedazo de papel.
La principal oferta electoral del PDC, presentados de una u otra manera, son bonos y más bonos, subsidios y más subsidios sean pintados de mayores pensiones, perdonazos tributarios, salario universal para todas las mujeres, cero aranceles en celulares y otros; es decir, un despelote económico, más del que ya existe. Claro que la oferta suena atractiva para la gente sin educación, pero es una invitación al infierno.
La gran mayoría de bolivianos de bien, conscientes de la situación actual del país, votaría abrumadoramente por LIBRE; nadie desea continuar viviendo en la actual crisis de escasez de dólares, combustibles, y una espiral inflacionaria – ni Samuel, Manfred o Jaime, ni ningún personaje que influye la opinión pública. Si fuese así, ¿por qué no divulgan clara y permanentemente que un binomio nos llevará al descalabro total y el otro podrá sacarnos de la bancarrota económica y moral del país?
A pesar de todo, estoy convencido que LIBRE tiene grandes probabilidades de ganar en el balotaje. Paz no estará a la altura de Quiroga y Lara no parará de boicotearse y abollar la candidatura del PDC. Por un lado, LIBRE sacará gran ventaja en los debates (cuantos más mejor) – el binomio de LIBRE se lo tragaráenterito al PDC. LIBRE tendría que apuntar a atraer el voto que fue a UNIDAD (este partido no tiene la cohesión que tenía/ tiene el MAS y ese electorado es más pensante) y hacer dar cuenta (no solamente informar) a la población que el PDC estaría tomando la posta del MAS para continuar con el autoritarismo, el narcotráfico, y la corrupción.
Lamentablemente, la primer vuelta era importante para determinar la composición del Legislativo y los bolivianos perdimos la oportunidad de reconstruir nuestra Patria, como era la intención de la “oposición”. Para aprobar la mayoría de las leyes se necesita la mayoría absoluta, más del 50%. Con esta premisa, en la Cámara de Senadores, LIBRE tendría 12 senadores, o un tercio (36%) de representación; PDC 44% (16senadores), UNIDAD 19% (7) y SÚMATE 3% (1). La mayoría más uno representa 19 senadores. A LIBRE le alcanza con el apoyo total de UNIDAD, entre otros cálculos políticos. Al PDC le faltarían tres senadores, más fáciles de obtener pero el apoyo de UNIDAD sería imprescindible. Esta puede ser la entrada al poder por la puerta trasera de Samuel si no le importa Bolivia. Claro, por ahí quiere obtener también otros réditos. Pero también tiene una mejor opción: que su partido apoye a LIBRE y nos salvemos de los zurdos. Samuel tiene la opción de mostrar grandeza y, más que todo, el país le premiaría tal vez en un corto/ mediano plazo con algo que hasta el momento no ha podido lograr. Tal vez sea su última oportunidad. El panorama en la Cámara de Diputados es similar.
¿Qué se vislumbra ante esta situación? Puede ser desde una mejora de la situación actual, pero eso no sirve de consuelo porque más abajo no podíamos caer. Se podrán avanzar en algunos temas pero posiblemente con acuerdos, medidas y/o reformas diluidas. Pero tampoco descarto que Lara lo serruche a Paz, con apoyo del MAS y el ejército adoctrinado durante veinte años, o que promuevan el caos y ese binomio cierre el Congreso. Si se dan estos horrorosos escenarios, Cuba, Venezuela, Rusia y China estarán pre avisados para “salvar” al país (más bien, terminar por deglutir a Bolivia) económicamente y blindar políticamente de cualquier protesta internacional.
Sería “ideal” que Tuto gane en la segunda vuelta y asuma la Presidencia, y que Rodrigo recapacite, se fraccione su partido en la Asamblea para que puedan hacer una alianza legislativa entre LIBRE y PDC (y bienvenido cualquier otro). Sería, además, un golpe, esta vez certero, a la izquierda. Pero la experiencia internacional nos demuestra lo contrario: los zurdos, desde adentro y desde afuera, no dejarían gobernar. Algo excepcional tendría que ocurrir.
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